Hace un par de días me preguntaron en una entrevista: ¿Cuál es el gran hallazgo que conseguiste con tu modelo “Liderazgo Ecléctico”?

No la vi venir, no me la esperaba, tragué grueso y las ideas explotaron como  cotufas en mi cabeza. La respuesta me tomó al menos 4 minutos, y creo que salí  airoso.

Muchos dirán:  con tanto tiempo trabajando ese tema y no lo sabía. Y quizás tengan razón, pero como yo lo interpreto, es que los temas van madurando, van tomando nuevo cuerpo, nuevas formas, y una pregunta – incluso repetida – puede llevarte a que veas y  articules lingüísticamente cosas nuevas, que antes no eran tan obvias. Eso me paso en esta oportunidad.

Después de tanto andar con el tema “Liderazgo Ecléctico”, me descubro diciendo con plena convicción que: El gran hallazgo  es la definición de la autenticidad del líder.

Ser autentico

¿Qué implica esto?  En un mundo arropado por información de todo tipo, por recibir pinceladas de distintas personalidades a lo largo de nuestra vida, por ser sugestionados por los medios y sus figuras, y  más reciente por la influencia de las redes sociales digitales, la autenticidad se ve comprometida y utópica.

Siendo lo anterior una realidad, lo que he visto en los líderes a los que le he servido  coach y mentor, es que con este proceso se logra: identificar gran parte de lo que somos, ordenarlo de una manera clara, y definir la personalidad única y  diferenciadora del líder.

Esto puede ser “coser y cantar” para unos, y para otros años de búsqueda, y lo que hemos conseguidos las personas que me han permitido servirles y yo, es descubrir la autenticidad al momento de liderar. Esto marca una diferencia del tamaño de un océano, sobre todos en estos  tiempos donde la incertidumbre es la reina del momento.

Una carrera

Hemos construido un camino de 4 estaciones, donde en cada parada hay un ejercicio de auto-mirada y redefinición de lo que hacemos – en forma y fondo -. Para mostrar este transitar uso esta analogía:

Una carrera en el beisbol necesita que el jugador pase y toque las 4 bases, de manera obligatoria. Hay jugadores – una minoría –  que se paran a batear, ven la bola clarita,  hacen el swing correcto y batean un cuadrangular, recorren las 4 bases y  anotan la carrera, incluso llegan a impulsar a otros que están en las bases.

Para otros el camino es menos expedito, deben ir base por base, deteniéndose, mirando el entorno, pendiente de la estrategia, revisando sus oportunidades, decidiendo que hacer para usar su energía y potencia,  y así ir avanzado  y alcanzar hacer la carrera.

¿Cómo lograr la autenticidad? En el home (o plato), revisamos que le hace tan  particular, con quienes cuenta en el equipo y como se mueven, detallando los lanzamientos que están caracterizando  el juego y al  lanzador.

En la primera, nos dedicamos a mirar la forma de llegar hacer la anotación, considerando las estrategias y las reglas del juego, que permitan avanzar y anotar.

En la segunda, estamos en el momento cumbre, aquí sabemos que viene el momento de mayor influencia, y que define mucho lo que va a pasar, aquí le corresponde influir en el equipo para que hagan lo necesario.

En la tercera, llega el momento de darlo  todo, de poner la creatividad y  la energía en mismo sentido para lograr conseguir llegar al plato y  anotar la carrera, la carrera que marca la autenticidad para liderar.

Cada base representa uno de los 4 pilares del liderazgo  ecléctico, y que, sin duda, permiten a cada líder descubrir su autenticidad para conectar su esencia con su misión, y generar grandes resultados a su manera.

¿Tienes clara tu autenticidad como líder?

Amancio Ojeda Saavedra

@amanciojeda

amancio@alianzasdeaprendizaje.com